Galicia, 30 de Marzo de 2.021

D. Antonio Señaris del Rio, en calidad de Presidente de FETRAM (Federación Empresarial de Transportes de Mercancías por Carretera de Galicia).

D. Jose Fernandez Delgado, en calidad de Presidente de UITA (Unión Independiente de Transportistas Autónomos de Asturias).

DAÑOS COLATERALES POLITICOS

         Desde los albores de la democracia, no ha existido tiempo de paz, paz en la guerra política existente en este país.

         Una guerra, como todas las habidas hasta la actualidad, cargada de daños colaterales. Han pasado años de los enfrentamientos entre bando de la derecha y la izquierda, enfrentamientos cuyos damnificados, no son sus ejércitos, sino que en todos los casos ha sido el pueblo, la sociedad y el bienestar.

         En la actualidad, se lleva a cabo el conflicto de ENCE, un conflicto en el que los transportistas son los más perjudicados, una encarnizada lucha para cerrar una industria, una industria que ha unido desde décadas Asturias y Galicia.

El sector del transporte, es uno de esos daños colaterales, que por un motivo o por otro, tenemos la diana en la espalda, y las vendettas personales de cada bando, las llevan a cabo contra nuestro sector.

El pasado 19 de febrero de este año, se llevó a cabo una movilización con destino la Delegación del Gobierno en Galicia, por el futuro de una gran cantidad de transportistas y trabajadores forestales, llevando a cabo todo el protocolo necesario para cumplir con la legislación actual, habiéndose hecho el comunicado pertinente a las autoridades de seguridad, incluyendo las rutas a realizar por los transportistas. De hecho la caravana, fue secuenciado por agentes de la Guardia Civil, hasta su llegada a A Coruña, y una vez llegados a A Coruña, los vehículos articulados tenían que enlazar la avenida Alfonso Molina, la bifurcación AC-10 (Túnel de Eiris), para emprender el camino de vuelta.

Cuando estaban realizando el trayecto, y cruzando el Túnel de Eiris en Coruña, la policía local los interceptó y paralizó que siguieran con la ruta establecida. Desde un principio se creyó que se trataba de la adecuación de la ruta por parte de las autoridades locales.

Ahí empiezan la batalla política, los agentes locales de la ciudad socialista, cogiendo Tablet y puntero empiezan a sancionar a todos los vehículos articulados que ellos mismos bloquearon, poniendo sanciones a todos los camiones por haber estacionado en calzada y abandono de las cabinas, pero sin notificar en el momento, ni dejando boletín de la denuncia.

Y como no, la vendetta entre el sol y la luna, cayendo todo el peso de la ley, sobre los transportistas, meros ciudadanos y contribuyentes a la economía, pero la única forma de incomodar al otro lado.

ANEXO FOTOS

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